El pobre empate logrado en Las Palmas en la tarde de ayer ha complicado algo más que ligeramente, calificativo usado por Víctor Fernández para definir la situación actual, las posibilidades de ascenso del conjunto verdiblanco.
Si en anteriores jornadas los fallos de los rivales maquillaron el bajón de resultados del Betis, esta última, con triunfos de Real Sociedad, Cartagena y Levante, ha dejado a los de las trece barras a cuatro puntos de los puestos de ascenso, frontera marcada por el conjunto murciano con 58 puntos.
Claro está que el Betis aún está a tiempo de enmendar sus pecados, pero la realidad no es otra que le está costando sudor y sangre conseguir algún triunfo, y con siete jornadas por disputarse y con cuatro puntos que remontar, mucho deben cambiar las cosas.
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